Ante la falta de profesionales calificados en Bolivia, el industrial boliviano Simón I. Patiño (1860-1947) tuvo la idea de crear en 1931 en La Paz la Fundación Universitaria Simón I. Patiño, con el principal objetivo de formar profesionales bolivianos de alto nivel que permitiesen al País disminuir su dependencia para con los especialistas extranjeros.